Hoy cierro un ciclo más en mi vida profesional y personal. Esta vez como diputada de la LXVII Legislatura y bajo los colores de mi partido, el Revolucionario Institucional, a quien agradezco la oportunidad de poder ser una verdadera voz de protesta, pero sobre todo ser una oposición responsable que siempre mantuvo un espacio abierto para hacerse escuchar y poner en la mesa los temas torales que fueron la bandera que desde el tricolor portamos, así se pronunció la diputada Luz María Palacios Farrera.
A unas horas de cerrarse el periodo de ejercicio de la LXVII Legislatura expuso que han sido tres años llenos de experiencias, tres años en los que logramos palpar los intereses mezquinos de unos y el compromiso de otros. Tres años en los que pude coincidir con mujeres y hombres a los que llegué a admirar, en algunos casos, respetar en otros, y marcar diferencias ideológicas con unos más. Nada personal, aclaro. Todo fue en apego a la forma en que cada uno concibe sus valores y principios, en apego a los intereses de partido y de grupos, en apego a la legalidad y siempre ponderando al pueblo la postura que ser legislador nos exige.
Ser portavoz de campesinos, de mujeres y hombres, de las causas justas, de conflictos, de violaciones a los derechos humanos, entre otros, me permitió conocer, aún más, la realidad que se vive en Chiapas: una realidad que muchas veces no sale a la luz, una realidad que en muchos casos, desde el poder, se oculta o se maquilla como la violencia política en razón de género y la violencia digital que muchas diputadas sufrimos esta legislatura.
Hoy, agradezco especialmente a los amigos de los medios de comunicación, a todos, incluso a aquellos que volcaron su coraje y resentimiento hacia mi persona y mi familia por instrucciones de políticos a los que, tarde o temprano, segura estoy, alcanzará la justicia. Pero sobre todo, a las mujeres y hombres que hacen un periodismo serio y objetivo, un periodismo crítico, responsable y sin inclinaciones, y que nos permite, a quienes estamos en la administración pública, a quienes somos funcionarios públicos, crecer y aprender de nuestros aciertos y errores.
Hoy cierro un ciclo más y con la frente en alto les digo que voy a seguir preparándome, a seguir aprendiendo, a seguir caminando con los que menos tienen, a seguir escuchando a quienes lo necesitan y a seguir acompañando a todos aquellos que acudan a las puertas de la casa, las del tricolor, el partido en el que he caminado y en el que hemos aprendido a ser portavoces del pueblo, y en el que seguiremos formando militancia.
Gracias a mi familia, a mis amigos, a mis compañeros y compañeras diputadas, pero sobre todo gracias a Dios por todo. Que la vida nos siga sonriendo a todos y que este periodo de pandemia que aún sigue sea el pretexto para poder ser mejores personas, mejores seres humanos, mejores ciudadanos, que es lo que tanto requiere nuestro Chiapas, puntualizó, quien es madre de tres hijas. ASICH